Cirugías Ablativas: Evisceración ocular, enucleación ocular y Cirugía tumoral.

Evisceración ocular

Consiste en el vaciado del contenido ocular, respetando la esclera y musculatura extraocular.

Si tenemos en cuenta una revisión de 1013 de nuestros pacientes, en la que pormenorizábamos las causas de pérdida del globo ocular y que formó parte de la Ponencia Oficial de la Sociedad Española de Oftalmología del año 1990; podemos hacer un cálculo exceptuando los casos tumorales (16.68%), y algunas patologias congenitas (8.78%), en cuanto a la proporción de los pacientes a los que se les puede realizar evisceración (80%), en lugar de enucleación. Es una intervención más conservadora, en la que obtenemos un muy bajo índice de intolerancia al implante sintético que utilizamos de relleno (2.7%). Las técnicas que empleamos están encaminadas a usar implantes de gran tamaño, en adultos el que utilizamos con mayor frecuencisa es el de 22 mm., con lo que conseguimos una buena corrección de volumen.

En la Clínica Doctores Laiseca, estamos combinando dicha técnica con injertos de grasa del propio paciente, distribuidos en distintas zonas de la orbita, o en la cara anterior del implante, con muy buenos resultados.

Para obtener una incidencia tan baja de complicaciones, nos parece vital recubrir con suficiente espesor de tejido la cara anterior del implante sintético, con solapas de esclera. O bien, con un autoinjerto dermo graso laminar, que minimice el roce con la cara posterior de la prótesis, soportando mejor, de esta forma, la erosión tisular que provoca la superficie adherente y rugosa de estos implantes.

Enucleación ocular

Supone la extirpación de todo el globo ocular incluyendo, por tanto, la esclera.

Es la técnica indicada para los casos de patología tumoral, aunque también la usamos en aquellos casos en los que la esclera remanente del paciente es escasa, o está muy retraida para hacer una evisceración. El tumor más frecuente dentro de la estadística recogida por nosotros es el retinoblastoma (52,6% del total de tumores), seguido del melanoma de coroides (23,6%).

En todos ellos la cirugía de enucleación es la indicada, ya que, la pieza debe ser enviada al laboratorio de anatomía patológica para su estudio; dando un diagnóstico de certeza de la estirpe tumoral y si la extirpación ha sido completa.

En estos casos, siempre reconstruimos el volumen orbitario con impantes sintéticos de gran tamaño y coberturas autólogas del paciente, en la cara anterior de dicho implante.

Cirugía tumoral

Tumores benignos: el que vemos con mayor frecuencia en consulta es el Xantelasma. Se trata de un depósito de lipoproteinas que pigmenta la epidermis, puede aparecer en pacientes diabéticos o con alguna dislipemia. Su tratamiento es quirúrgico por motivos estéticos.
 
Tumores malignos: el más frecuente es el Basocelular. Aparece con mayor frecuencia en el párpado inferior, es infiltrativo a nivel local, pero no provoca metástasis. Su tratamiento es la extirpación en bloque con márgenes suficientes en todos sus bordes para evitar recidivas.